¿Que me quieres decir Señor?, si Tu no me hablas yo no puedo decir nada a los hermanos. El día del Señor es un día especial, es el día de la Iglesia, es el dia del pueblo peregrino, es el dia de la esperanza.

Estos y otros pensamientos similares se nos presentaron el primer fin de semana de febrero, en nuestra convivencia de matrimonios, y nos invitaron a meditar profundamente sobre nuestra actitud personal y nuestra vivencia del domingo cristiano, "dies domini"

Un nutrido numero de matrimonios del Club Social Fordis, nos reunimos en la casa de espiritualidad de las Hermanas Misoneras de Betania de  Cornellá, y pudimos disfrutar de la excelente exposición de los tres temas a cargo de las hermanas designadas como temistas y su posterior reflexión en pequeños grupos.

Se nos recordó que la Eucaristía es el corazón de la Iglesia, es envío a los hermanos, como nos recuerda muy frecuentemente nuestro querido Papa Francisco y que no podemos vivir sin ella y debemos, especialmente el domingo, prepararla y disfrutarla convenientemente abriendo de par en par las puertas de nuestro corazón a la Palabra que nos salva. También nuestro descanso merecido debe ser un descanso "en Dios", con el fin de evitar ir excesivamente cargados de elementos materiales que nos dificultan el camino.

En definitiva, podemos preguntarnos...¿ que frutos tiene que haber en mi vida y en la sociedad en que me muevo, cuando vivo el día del Señor y la Eucaristia conscientemente?. Vivamos esta Cuaresma con sentimientos de caridad, misericordia y apostolado...Cristo ha resucitado y nos interpela.

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